Hoy en día, la ciudad de Nueva York sigue siendo una capital de la moda a nivel mundial, en parte debido a su diversidad, riqueza cultural y fortaleza financiera. Como en el pasado, la inmigración sigue contribuyendo a la fuerza laboral, el espíritu empresarial y el liderazgo creativo en la moda. El hip-hop sigue influyendo en los estilos para hombres y mujeres, como se puede ver, por ejemplo, en la alianza de Gucci con Dapper Dan de Harlem, lo que demuestra cómo la moda deportiva, el estilo urbano y el lujo se intersectan cada vez más.